Anecdotario.

El peso del vacío.

Ese, el más difícil y complicado de levantar...

... de sostener, de aguantar y de cargar.

La inmediatez revisita la historia pasando revista con el índice ensalivado.

Sucumbiendo al sucundum de un Kaiser Carabela de paseo por el barrio.

Rumbeé en el rumbo de la rumba en sus caderas.

Comete lo que el cometa comete cuando pasa cada setenta y cinco años.

Garota de Ipanema en carnaval carioca, una vez en la vida.

Es la hora del pique y el pescado se las pica vayase a saber adonde.

A la vera del verano, Vera, espera en devaneos.

En su seno, leches elementales brotan.

Paisito de baldeados terratenientes de terrenitos baldíos.

Soy un bicho raro, un pichi, tu insecticida ni me mosquea.

Masa madre de malasangre. Me leva y me deja hinchado.

En un ocioso capullo recreativo desiderativo me repienso.

Los trapitos al sol en el tendedero de la terraza comunitaria danzan.

Extasiado saciado. Existista excitado exitoso se pierde en la victoria.

Lo sorpresivo no sorprende más. Ensayado hasta el acto fallido.

Quieren sacar partido del partido perdido los ganadores.

Sé que nada me viene bien.

Sin mandarme la parte, lo digo.

No creo en un dios que todo lo creó. Sabés que sí?

Mundanal ruido anecdotario. Y así, esas cosas.

El exceso de claridad es el mismo que enceguese también.

Friso frío por la espina dorsal se alza.Los pelitos de punta.

-Qué me agarras? -

-Qué Garrón, no?-

-Creeme, es la primera vez que me pasa-.

-La primera y la última-, dijo.

La muerte no espera y de un solo vistazo, con los ojos bien abiertos me lleva.

M.O.V.