Velo

Desde lejos en lontananza.

Mar de fondo en el fondo del mar.

Revolviendo me siento que vuelvo.

Veo como siento, lo siento, todo veo.

El aireador burbujeantemente respira.

Boqueo como un pescado afuera del agua.

Busco en buceo, búsqueda en aguas negras alcantarilladas.

Encuentro dentro de las botellas el mensaje de quienes somos.

Ostento una osamenta, con alambres, osambre del hambre.

Mis espinas camino a la orilla río arriba queriendo arribar.

Con las querencias y las carencias careadas acarreadas.

Disímiles apetencias las mías en un mundo inapetente.

Salvifico todo aquelo que sí podemos poner a salvo.

Salvo el sálvese quien pueda, eso te lo dejo a vos.

Dios ocioso odioso impetuoso voluminoso.

Voy defendiéndome con mi lengua.

Definiéndome indefinidamente.

Lunfardismo hispanohablante.

Ando andando y desandando.

De lo que tengo para decir.

Lo que tiene que ser dicho.

Boludeándome al voleo.

Cagado en las patas.

Cagando fuego.

Cagando leches.

Cagando aceite.

Doy que pensar.

Doy que hablar.

El velo desvelo.

Así que velo así.

Un superhombre.

La diez del Diego.

Irreemplazable.

Desocupado.

Yo me ocupo.

Trácate ñacate.

Yo asumo.

A lo sumo.

Sumo, suma.

Divididos, Las Pelotas.

Y como Luca Prodan.

Yo quiero a mi bandera.

M.O.V.